“El buen juez por su casa empieza”
Por Víctor A. Hernández Manzano
ABRIL 2011.- La basura es un problema que nos concierne y perjudica a todos. En promedio, una persona produce alrededor de 1 kilogramo diario de basura, lo que significa que entre más crecemos en número de habitantes, también la basura lo hace.
Suele ser evidente a la vista de todos que en las calles, parques, carreteras, barrancas e incluso en los cauces de ríos, nos encontremos con tanto desperdicio (plásticos, cartones, papel, restos de comida, madera, cenizas, envases de cristal, de metal o de hojalata, animal muertos, etc.), pero es más preocupante encontrarlos en los campos donde se cultivan los alimentos que van a parar a los hogares para su consumo. Se observa la contaminación ambiental como un paisaje de la inconciencia de parte de todos nosotros, y de las autoridades por no tener el debido cuidado para darle una solución a esta acumulación de residuos.
Lo más preocupante es que ya lo vemos como algo normal en nuestras vidas, los niños jugando alrededor de ella y los adultos no nos molestamos por levantar nuestros propios desperdicios, las autoridades dándole vuelta a su responsabilidad de proveer de los camiones para su recolección, y de un espacio adecuado para un relleno sanitario acorde a las necesidades de la población.
Hay que empezar a concientizarnos nosotros mismos enseñando a nuestros hijos a no tirar la basura en cualquier lugar, recuerda que “Una ciudad limpia no es la que se barre todos los días, sino la que no se ensucia”.
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