12 enero 2011

ÚLTIMO ADIÓS A ABRAHAM ORTIZ ROSAS

Por L. K. González. TEMOAC, MOR. 12/1/11.- Desde las ocho de la mañana, los pobladores del municipio de Temoac, esperaban en la explanada de la presidencia el ataúd del Profesor Abraham Ortiz. Los medios de comunicación local y las fuerzas policiales del estado caminaban también en espera del homenaje que el municipio le rendiría a su Edil. Pasadas las 10 de la mañana, subió por la carretera la camioneta que traía, desde su casa en Amilcingo, el ataúd del presidente y el de su hijo. Caminado le seguía su esposa y madre, la Profesora Rosalba Martínez, quien iba acompañada en todo momento de la Lic. Edith Tarango, presidenta del DIF Municipal de Zacualpan. El ataúd fue puesto en la entrada de la presidencia y los honores empezaron para dar el último adiós al Presidente Municipal de Temoac. Al evento asistieron los Presidentes Municipales de Tepalcingo, Jonacatepec, Zacualpan, Jantetelco, Yautepec, Mazatepec, Puente de Ixtla y Cuautla. Además la esposa del gobernador del estado, Profesora Mayela Alemán de Adame, arribó a la presidencia para darle ánimos a los familiares del occiso.

Tanto los trabajadores del municipio cómo los presidentes ahí reunidos, se mostraban dolidos y anonadados ante los eventos ocurridos el pasado lunes 10, donde fue asesinado el presidente Abraham Ortiz Rosas. En el acto, la esposa del presidente, Profesora Rosalba Martínez dijo que su esposo y su hijo amaban al pueblo de Temoac, y por eso su sangre fue derramada. Que no murieron como cobardes, sino cómo valientes. Que ojalá sea un ejemplo de legado para alzar la voz y pelear contra el miedo. Además públicamente perdonó a los agresores de su familia, y pidió que las leyes de los humanos hagan lo que tengan que hacer. Agradeció a la gente ahí reunida por estar con ella en este momento.
 Por su parte la Profesora Mayela Alemán pidió que el perdón y la reconciliación sea el punto de partida para que nunca más se diga que Temoac es un lugar de enfrentamientos, de conflicto, de odio. Y que la sangre derramada sea el punto de partida de una vida de unidad y reconciliación; que nunca más pase en Temoac algo así. Agregó que el pueblo no puede ser igual que antes. Así también, el padre del Presidente Municipal, Venancio Ortiz dijo que pedía perdón a todos aquellos a los que su hijo no les hubiera servido tal cómo debía de ser, pues apenas empezaba, y era imposible que sirviera cómo debe de ser; además agregó que su hijo servía con gusto y ponía todo el corazón en el trabajo del municipio.

Finalmente agregó que los regidores sabían perfectamente el proyecto de gobierno que su hijo tenía, por lo que las obras inconclusas les quedan de tarea para terminar bien la administración. Al final el pueblo brindó un aplauso a los restos del Profesor Abraham, mientras los presidentes municipales cargaban el ataúd para subirlo a la camioneta. El vehículo partió con rumbo a Amilcingo, mientras los pobladores lo seguían a pie por la avenida principal. Finalmente los restos del Edil fueron enterrados en el panteón de su comunidad natal, Amilcingo.